El amor es para todos

El amor se representa de muchas maneras. Desde el abrazo fraternal entre amigos, hasta el beso apasionado con la pareja. Cada instante es simbólico cuando nace el amor entre dos personas que comparten un mismo sentimiento, y eso es lo más hermoso de la vida porque te colma de energía en cada momento.

Por eso es que dicen que el amor todo lo puede, porque con una gota de afecto puro, cambia cualquier escenario, y quien ha sentido el cariño por alguien sabe que es así y ratifica mi pensamiento.

A diario observo el cariño entre las personas y tal sentimiento, me da la sensación de querer sentir lo mismo. Es una situación un tanto pegajoso, tal como cuando se derrama un poco de chocolate entre tus dedos. Es un momento apetitoso ver el lugar derramado, pero tal momento logra el deseo de probar ese poquito de sabor, hasta limpiar tus dedos con tu boca. Así es el amor; cuando conoces el enamoramiento, anhelas conocer a alguien con quien vivir bonitas experiencias y llenarte de recuerdos que rescaten las aventuras mágicas con la otra persona. 

Hace poco leí que los abrazos son importantes porque te ayuda a conectarte con el otro. Dar y recibir abrazos es un ejercicio mutuo que a diario se debe realizar para saber que no estás solo, pues siempre habrá alguien a quien le importas.

Todos meremos amar y regalar abrazos. No es cuestión de momento sino de amar a diario porque es la manera de tener la energía necesaria para vivir. Sin amor nadie merece estar porque es lo que te ayuda a crear sonrisas en el rostro. Cuando escucho decir: «No sirvo para enamorarme», «no quiero una pareja» o simplemente: «cierro la puerta del amor», considero que es el peor error que puede cometer el individuo porque su vida se marchitaría como la planta cuando carece de agua. Es vivir en un constante caos donde la única escapatoria está oculta en un túnel oscuro sin miras a la salida.

Amar es fácil lo complicado del asunto son las personas que no saben cómo enamorarse. Cuando se está en una relación, así sea de amistad o amorosa, hay que ser comprensible y tolerante. Entender que las personas son distintas y así deben ser aceptadas, porque forman parte de su identidad. Además, una relación es para disfrutarla y no para quitarle la libertad al otro. Es razonar que la vida es una sola y no se debe perder el tiempo con peleas y disgustos.

Hoy más que nunca ratifico el amor porque está en peligro de extinción y sin amor no existiría la humanidad.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio